"Tenga usted en cuenta que a él tampoco puedo decir que lo conozca. Pero debemos ayudarnos unos a otros”, Albert Camus (La Peste)
Hasta hace un tiempo pensaba que para hacer cambios sociales dependíamos únicamente del ejercicio político. Por fortuna, el encuentro que tuve con distintas personas y situaciones me hizo cambiar de opinión. Ver a los seres más desvalidos como víctimas que no pueden hacer nada, es reducirlos a una visión egoísta y miserable; es no confiar en sus capacidades para desarrollarse y progresar. Implícitamente, es asumir que otra persona tiene que vivir por ellos para salvarlos, en actitud de mesías. Cuento esto porque fue lo primero que me encontré cuando recién entré a TECHO, la marca actual de la antigua fundación Un techo para mi país.
En TECHO, lo primero que me dijeron al ingresar como practicante y voluntario fue—parafraseo—: Nosotros no construimos casas, y no es lo único que hacemos. Y añadieron: la vivienda no es gratis. Por supuesto, tiene un valor que se les cobra a las familias, pero no es comparable con su valor real. Concluyeron: cobramos esto porque no somos asistencialistas. Cuando vos le regalás algo a alguien, después te pedirá otras cosas; además la gente no valora lo que se le regala; pero cuando le cuesta, cuida lo que ha conseguido. Tenían toda la razón.
Han pasado varios meses, y he vivido de cerca la realidad de aquellas palabras desde que recibí la inducción ese mes de marzo de 2014.
Nuestro evento más importante, es la Gran Colecta Nacional que se hace cada año el mes de julio en las principales calles de las ciudades de Cali, Bogotá, Medellín, Barranquilla y Cartagena. En todas las ciudades será del 25 al 27; en Cali la ciudadanía se concentrará en hacer la mejor colecta durante los días 25 y 26.
Con esta actividad, TECHO busca hacer visible su denuncia social sobre la situación de pobreza extrema en la que viven miles de familias en Colombia. Por otro lado, se busca convocar a miles de ciudadanos a que participen como voluntarios para construir con las familias, nuevas formas de fortalecimiento comunitario. Y por último, recoger fondos para seguir incidiendo en políticas públicas, a través de planes de desarrollo comunitario como la construcción de viviendas de emergencia (ver más).
El evento masivo que busca movilizar 4.000 voluntarios en todo el país; convocará en Cali a 500 personas para involucrarlas como parte de una ciudadanía más participativa e incluyente.
Decía Gaitán que el hambre no es conservadora ni liberal, y en este sentido tampoco la pobreza tiene partido. Los problemas originados por el ser humano deben ser solucionados indiferentemente de los colores y las ideologías. Es por esto, que invito a quienes estén interesados en participar en esta labor social, a inscribirse en: http://www.colectatechocolombia.org/.