Y nosotros los hombres qué

Y nosotros los hombres qué

"A raíz de todos estos escándalos que salen a la luz contra la mujer indefensa, ¡los machos hemos quedado en la picota pública!"

Por: Rodrigo Beltrán
enero 26, 2018
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Y nosotros los hombres qué

Aplaudo el valor que tiene la mujer hoy en día para denunciar hechos violentos contra su integridad por parte de los hombres, esposos agresivos o en el peor de los casos enfermos solitarios que deambulan por calles, campos y ciudades en Colombia. A este valor se junta la creciente y bien recibida solidaridad de parte del sexo femenino, muchas de ellas columnistas, psicólogas o expertas en relación de pareja, que manifiestan rechazo a estos actos, y, también, por parte del ser humano masculino correcto, padres de familia, que tienen claro el respeto y la relación armónica en pareja y el no a la violencia en todas sus latitudes.

Pero… y nosotros los hombres, ¿qué? A raíz de todos estos escándalos que salen a la luz contra la mujer indefensa, ¡los machos hemos quedado en la picota pública! Nuestro prestigio se viene derrumbando a pasos agigantados, pues queda claro con el manejo de la información y los contenidos en medios convencionales y redes sociales que la víctima es una sola, ella, y que los hombres, como animales y sicópatas muchos, hemos perdido la dignidad, el control y la vergüenza. Sin embargo, solo en Colombia, existen estudios que los medios periodísticos poco tocan (¿será que no producen rating?), en donde se afirma que son también muchas las demandas en aumento de hombres a mujeres que cursan en los juzgados, en la fiscalía y en otros estamentos que estudian la violencia intrafamiliar por el maltrato, incluso acoso de parte de ella; si, de ella.

Se afirma, entre otras cosas, que poco se conocen precisamente porque el machismo del hombre no le permite hacer público lo que para muchos masculinos es hacer el ridículo social, por dejarse pegar o maltratar del mal llamado sexo débil. Invitaría yo a hombres con pantalones, que denunciaran públicamente esos casos de los que han sido víctimas y esperar cuál es la solidaridad entre nosotros mismos, de los estudiosos en relación de pareja y si esa noticia “vende” tanta información e impacto, lo mismo que la acogida en las redes sociales.

“Las brujas que las hay las hay”, dice el adagio popular, y se ha establecido que son varios los casos en los que ellas, utilizando habilidades para mentir y hacerse la víctima siendo las victimarias, escalan posiciones sociales, de poder, logran acuerdos de dinero importante en contraprestación al chantaje hacia los hombres que guardan silencio ante situaciones conflictivas graves de relación de pareja. Se dice que en la Fiscalía hay casos cada vez más numerosos en los que se le comprueba a las mujeres (algunas trepadoras como se les llama) que han utilizado hábilmente el engaño, la mentira, el cinismo, la actuación y demás herramientas que solo ellas pueden lograr, para alcanzar objetivos ventajosos y manipular en casos de divorcios o simplemente relaciones altamente conflictivas o peligrosas con sus parejas, sobre todo frente a la justicia, dejando como el único culpable a “él”.

No estoy con este planteamiento queriendo tapar el sol con las manos o querer abrir la ventana nuevamente a una guerra de sexos o similar. Simplemente, estoy haciendo un llamado a los hombres maltratados, a los medios de información, a las redes sociales para que se hable sobre esta problemática de manera integral, o sea la realidad completa. Las mujeres y los hombres somos víctimas, no sé si por igual, pero hay casos aberrantes de parte de uno y de otra… todos dignos de castigo y censura social.

En el fondo, aunque lamentable, el tema no es el caso de la mujer violentada o el hombre utilizado y también maltratado; el tema es la responsabilidad objetiva y de información completa de los medios periodísticos y de opinión frente a este deterioro de la sana convivencia entre hombres y mujeres, la destrucción de los valores de parte y parte, o si no estaremos echándole gasolina cada vez más a la relación violenta, al deseo del acoso sexual, a la pérdida de respeto y la tolerancia, dejando en los niños y nuevas generaciones un ejemplo aterrador propio del deterioro de nuestra sociedad, que al parecer no tiene límite, ni quien lo detenga.

Algunos datos dados publicados en medios sobre violencia intrafamiliar hacia los hombres:

  • Un artículo publicado por El Tiempo en noviembre de 2017 afirmó que durante ese año 1.400 hombres denunciaron violencia doméstica en Medellín y otros 95 declararon ser víctimas de delitos sexuales dentro del hogar, según la Personería. Según el artículo, aunque las mujeres son las que más sufren, los hombres no se escapan de la violencia intrafamiliar, aportan el 24 por ciento de los 5.770 casos que se han registrado en la ciudad este año.
  • El País de Cali reporta en una publicación de diciembre de 2017 que el Instituto de Medicina Legal registró 103.983 casos de violencia interpersonal en lo que va corrido del año a nivel nacional, según las últimas cifras actualizadas. El reporte de enero a noviembre da cuenta de 67.843 casos en hombres. En el caso de presuntos delitos sexuales se reportaron 3.101 hombres afectados.
  • El portal web Pulzo cuenta en este artículo el por qué los hombres no denuncian el maltrato.
  • Según el diario El Tiempo, entre 2015 y 2016, 69 hombres murieron y 13.213 resultaron heridos por sus parejas o exparejas. El diario agrega que Bogotá y Cundinamarca, con 10 muertos y 2.655 heridos en el 2016, están en lo más alto de los registros a nivel nacional. Antioquia, con 804 heridos y 8 fallecidos el año pasado, sigue en el listado.
  • Según Caracol Radio, al comparar las estadísticas de los años 2015 y 2016 se advierte que el problema está en notable aumento.
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