No nos llamemos a engaños, nos quedó un sabor agridulce después de que Mariana consiguiera la plata. Es que la Reina del BMX nos malacostumbró al oro. Igual, no sabíamos nada de su preparación, de sus lesiones, ignorábamos que si las olimpiadas no se aplazaran Pajón ni siquiera hubiera competido. Nos sorprendimos al enterarnos, horas antes de las finales, que la paisa ni siquiera era la favorita de los apostadores. Y lo logró, plata a pesar de las adversidades y si no celebramos como se debía es porque en el fondo sabemos que estamos viviendo los últimos estertores de una generación maravillosa.
Las gestas de Rio 2016 no se repetirán en décadas. En pesas sólo viajaron tres deportistas y la plata de Mosquera es una hazaña, Caterine Ibarguen, la diosa de Ebano, ya tiene 37 años y no le ganará a la venezolana Yulimar Rojas. Por la manera angustiosa como clasificó y la potencia y juventud de sus rivales, debemos decir que si consigue bronce será épico. El oro es difícil que aparezca. Tenemos opciones reales de medalla en los 20 km marcha con Eider Arévalo, en boxeo con los tres integrantes de la delegación que se mantienen vivos, Ingrit Valencia, Yuberjén Martínez y Ceiber Ávila y por ahí Anthony Zambrano en 400 metros. Pero desde ya hay que decir que no vamos a repetir lo de Rio.
Sin embargo la preocupación es todavía mayor si pensamos en los juegos olímpicos de Paris 2024. Para esas justas ya no estarán ni Caterine, ni Mariana, ni Yuberjen y al parecer no hay un recambio. Una de las pocas sorpresas que ha dado estas justas para Colombia es el descubrimiento del lanzador de disco Mauricio Ortega quien consiguió un cupo a las finales. De resto Colombia parece sin recambio y lo más seguro es que una vez se retiren Ibarguen y Pajón nos quedemos huérfanos. ¿Quién volverá a ganar un oro para nuestro país?