El día domingo estuve viendo la Liga Águila, puntualmente el partido entre la Equidad Seguros (nombre de una empresa de seguros) y el Once Caldas. La pobreza del partido que presentaron dos equipos que están en la parte alta de la tabla solo fue eclipsada por los dos golazos que anotaron, eso sí mediante jugadas individuales que en últimas no le hacen honor a un deporte colectivo y que se juega en equipo como lo es el fútbol.
Sin embargo, lo que realmente me sorprendió fue el irrespeto por el televidente. Me puse en la dispendiosa tarea de contar las pautas publicitarias que hacían durante el partido y encontré lo siguiente: en los 90 minutos y en la adición del juego fueron noventa, es decir, una cada minuto de juego. Quedé horrorizado, francamente un despropósito y una ofensa al espectador.
Nadie niega que el deporte, más en este país, necesita la publicidad para recaudar ingresos y así tener una fuente de inversión, sobre todo porque la historia de Colombia nos ha mostrado que la clase política no lo tiene dentro de su agenda de prioridades. A los gobiernos de turno no les interesa que los deportistas se formen y reciban la ayuda necesaria para una preparación óptima y de calidad, solo se vienen a preocupar del deportista cuando este, con la iniciativa privada y personalísima, consigue un triunfo personal y familiar. Ahí es cuando saltan estos lagartos oportunistas a decir que el triunfo es de "la patria" y con él buscan tapar las enormes falencias sociales de un país que ha convertido el egoísmo en política social.
Pero una transmisión donde cada minuto colocan publicidad —desde llantas hasta colchones, desde harina de trigo hasta bicicletas, desde rodamientos para moto hasta casas de apuestas— no solo afecta la calidad del espectáculo sino que prácticamente me hizo pensar que no estaba viendo un partido de fútbol sino un maratón de pauta. Lo más curioso es que, según leí en las noticias, los gerentes de esa grosería de canal están pensando en sacar un canal "premium" (significa pague para verlo, como si ya no se pagara para verlo)... o sea, después de tanta publicidad, de lo que les pagan por pautas, de lo que reciben por los programadores del cable, e incluso de lo que ganan por tener los derechos exclusivos del fútbol profesional colombiano, ¿no les alcanza la plata? Esto es el colmo de la avaricia, pero como en este país avaricia significa "emprendimiento", entonces supongo que está bien.
Por otra parte, en muchas transmisiones se dedican a criticar los estadios, puntualmente por el tema de la iluminación. Y puede que tengan razón, pero no entiendo qué pueden hablar ellos de la iluminación si ni siquiera van al estadio al que transmiten, todo lo hacen desde Bogotá. Pobre Win Sports, el dinero que tiene no le alcanza para enviar a sus comentaristas y relatores a la ciudad donde se va a dar el partido... lo que acentúa el poco profesionalismo y antiestética de la transmisión; eso sin hablar de la calidad y preparación de los comentaristas, pues de ello hablaremos en una próxima edición, ya que de la pobreza y falencias del relator deportivo colombiano hay mucha tela por cortar.
Yo les recomiendo que si van a copiarle a las grandes ligas del mundo, copien lo bueno. En la liga Argentina, por ejemplo —con todo y la crisis económica profunda que están viviendo—, no hay una sola pauta publicitaria (salvo las que se exhiben en el estadio) durante la transmisión. El relator se dedica a narrar las incidencias del partido y lo hace con una calidad admirable, no solo porque está en el estadio (observa el ambiente que lo rodea y lo transmite en su relato), sino porque está secundado por dos periodistas que se encuentran cada uno con la banca de los equipos contrincantes y le narran las percepciones e incidencias que acontecen en ellos.
En la transmisión de Win Sports los silencios que se ocasionan cuando el relator —desde Bogotá— le pregunta algo al periodista que está en el estadio son francamente incómodos y tratan de disimularlos con una pauta publicitaria, o, lo que es peor, interrumpen el comentario de alguno de los relatores para colocar más publicidad... ¿será que la transmisión de Win Sports es la "que todos queremos”?