Durante más de 50 años, se ha sembrado violencia en Colombia. Este documental da voz a personas que piensan y trabajan por la paz. Realizado por: David Adams Rico y Federico Olmus Tisnés.
Los medios de comunicación cuentan relatos de ficción y no ficción basados en sus discursos. Desde el constructivismo social de John Shotter se afirma que “la realidad se construye a través del lenguaje", es decir, lo que consideramos “real” muchas veces es un artificio humano que creamos a través de las palabras. Esto no quiere decir que la guerra es únicamente una construcción lingüística. Sin embargo sí debemos cuestionarnos sobre qué tipo de realidad estamos construyendo si cargamos nuestro lenguaje de miedo y de violencia. Surge la pregunta: ¿cómo podríamos invertir ese mecanismo de terror usado por los medios? Tal vez si empezamos a contar historias más amplias, más ricas sobre nosotros mismos; solo así podremos construir nuevas realidades. El poder de la palabra nos permite señalar la coexistencia de historias de paz con las historias de guerra. Mostremos que estas historias también existen y multipliquemos esas realidades.
Visibilicemos historias de personas valientes que han decidido construir en vez de destruir, incluir en vez de excluir. Ofrezcamos una identidad y una perspectiva de la realidad desde un lugar propositivo y no a partir de la violencia y el miedo.
Creemos un discurso en el que se haga una re-significación de la memoria, una re-definición de la paz y una re-invención del papel de la palabra.
Cambiemos “el chip” de la mentalidad colombiana en los medios de comunicación, con la esperanza de que un mensaje sanador contagie a las personas y así empecemos a transitar hacia una cultura de paz creada en torno al respeto a la vida y a las diferencias.
Démosle una definición diversa y más completa a la paz, no desde la negación, desde la no violencia, sino a partir de lo que sí es. Paz es memoria. Paz es comunidad. Paz es palabra. Paz es arte. Paz es confianza. Paz es perdón. Paz es vida.
Hagamos paz, como nos sugiere Emerenciana Chicunque en el documental, “desde la casa, desde la palabra, desde el diálogo, desde el respeto con el uno y el otro. Que el arma grande para todos sea la palabra de cumplimiento; porque en la palabra no se firman actas, no se firman acuerdos, ni se firman decretos, solamente el cumplimiento a la palabra”.