En Popayán el Esmad se desbordó y atacó sin compasión a los estudiantes que salieron una vez a marchar. Se tienen identificados hasta el momento siete heridos, pero extraoficialmente los jóvenes heridos se cuentan por decenas. De hecho, uno de ellos, identificado como Esteban Mosquera perdió un ojo después de que un policía le disparara una bomba aturdidora.
En el centro histórico, la gente identificó a una persona como infiltrada del Esmad. Cuando le exigieron que se identificara, la policía llegó para protegerlo y esconderlo.