El juego sucio de la política también se traslada a las redes sociales. Hackers y expertos en propaganda negra disponen de sucias artimañas para desprestigiar un político al mejor postor. Para hacer parte de las bodeguitas hay que hacer un proceso de enlistamiento, pueden participar personas que tengan sus redes verificadas o que posean un promedio de 40 a 50 cuentas falsas y movidas por Bots.
Gustavo Petro y Álvaro Uribe se han visto envueltos en estos escándalos donde se crean campañas de desprestigio a sus opositores y Hashtags destructivos a las personas que no comparten sus pensamientos.
La serie Matarife que se ha convertido en tendencia mundial ha creado todo tipo de polémicas en estos dos sectores de la política, si revisamos las personas que han compartido el contenido y las cuentas que lo han rechazado, podremos darnos cuenta fácilmente cuántas de estas cuentas son compradas, falsas, movidas por bots, creadas recientemente o con intereses políticos.
Son millones de tweets los que se unieron a la tendencia de la serie del abogado Daniel Mendoza Leal y es imposible a estas alturas dar con un número exacto de cuentas que compartieron su contenido y las que lo rechazaron.
Lo que si es evidente hasta para el más iletrado usuario de las redes sociales es que buscando la palabra "Matarife", solamente en Twitter, podrá encontrar cuentas con un solo tweet o sin ningún seguidor que compartió el contenido
Incluso cuentas atiborradas del Hashtag de la serie documental con tweets que solamente se inundan en el numeral y justamente es el ruido que se busca generar.
Cuentas verificadas de influenciadores o supuestos periodistas rechazando la serie y otros compartiéndola, sin duda el estreno de matarife estremeció las redes sociales en Colombia.
Ahora solo queda preguntarse ¿Cuántas de esas cuentas que compartieron la serie de Matarife hacen parte de la bodega de Petro? ¿Cuántas de las que los rechazaron hacen parte de la Bodeguita Uribista?
Este hacker nos revelas las sucias tácticas y estrategias con las que destruyen la imagen de cualquier político