Tarde nublada en la vereda Aguas Prietas de Turbaco. Calles destapadas y olor a lluvia. En el improvisado ante jardín de una casa, Guillermo Enrique Torres, mejor conocido como Julian Conrado, exintegrante del Estado Mayor del Bloque Caribe de las Farc, cantaba con su guitarra la historia de una volqueta que se robaron en ese pueblo. Su esposa Lola Pérez, quien está con él desde finales de los ochenta, le cargaba su guitarra y el único político que lo acompañaba era el exalcade de Turbaco el “Chacho” Torres, quien fue el que llevó la energía electríca a esa vereda. Así, puerta por puerta ha hecho campaña Julian Conrado y aparece como el único capaz de disputarle el poder al candidato del Alfonso del Cristo Hilsaca.
Este comerciante momposino, conocido como “El turco Hilsaca” se hizo conocido en Colombia después de que exparamilitares del Bloque Héroes de Montes de María lo señalaron como uno de sus más incondicionales colaboradores. En noviembre del 2014 lo detuvieron en Cartagena acusado de haber asesinado a Edison Ovallos Angarita, hijo de un dirigente cartagenero. La Corte Suprema le dio validez a los testimonios de Diego Vecino y Ernesto Baez sobre las reuniones que sostuvo el ” El turco” en la finca El Caramelo, propiedad de Vecino para recibir el apoyo de las AUC para las campañas electorales en el 2002 de la familia García Zuccardi. Además de esas reuniones otros paramilitares como Juancho Dique aseguraron que Hilsaca ordenó la masacre de cuatro trabajadoras sexuales en Cartagena en diciembre del 2003. Hilsaca ha ejercido un poder absoluto en municipios como Turbaco.
Es a ese poder económico y político de familias que todo lo controlan, al que un hombre armado de una guitarra y con el lema Amando Venceremos, Julian Conrado, que intentará ganarle al poder establecido en el municipio.