Ubicado en el departamento del Quindío, cerca al municipio de Salento, se encuentra el Valle del Cocora donde destaca el árbol nacional de Colombia: la palma de cera del Quindío. Se dice que Cocora, era el nombre de una princesa Quimbaya y que significaba “estrella de agua”.
El Valle de Cocora está a una altura entre 1800 y 2400 metros sobre el nivel del mar y a una distancia de 24 kilómetros de Armenia, la Capital del Quindio.
El clima es de bosque nuboso con lluvias diarias y una temperatura que oscila entre los 15 y 25 grados centígrados.
Cocora, está ubicado en medio de las montañas del departamento del Quindío dentro de los límites del Parque Nacional de Los Nevados, y se ha convertido en uno de los más apetecidos destinos turísticos, para observar la palma de cera que se ha visto amenazada por usar sus hojas para la elaboración de los ramos utilizados en semana santa. Antiguamente la cera que produce era utilizada para elaborar velas.
El lugar puede ser recorrido a caballo, o a pie, y hay en el sitio gran número de experimentados conocedores del lugar que guían a los visitantes en sus paseos.
Para desplazarse hasta el lugar continuamente salen de Salento Jeeps que por solo 4 mil pesos te llevan hasta donde se hacen los recorridos por los espacios en donde es más fácil el acceso al parque.
Es bueno llevar con que abrigarse del frío y un paraguas pues en cualquier momento la lluvia le puede sorprender.
En el sitio hay muchas opciones para realizar: excursiones a caballo desde 10 mil pesos, zonas de camping; caminatas en grupos con guía; rutas para ciclistas; y para los menos aventureros bonitos restaurantes en donde tomar un café caliente y sentarse a observar el entorno, siempre bello.
Para registrar los momentos que allí se viven hay que tener a mano la cámara fotográfica o su celular que le permitirán guardar hermosos paisajes.
Para los amantes del pajareo, hay lugares en donde se logran hacer muy buenas fotos de las distintas especies de colibrís que habitan en la zona.
Una de las actividades que también puedes hacer es la de adoptar y sembrar una palma de cera. Esto te permitirá que haya una palma con tu nombre en ese bonito lugar.
Visitar el Valle del Cocora muy seguramente será un paseo inolvidable en el que el contacto directo con la naturaleza es un momento especial y además ver la imponencia de las palmas y sentir la tranquilidad del ambiente te reconfortarán.
Ah, otro aspecto importante es el de disfrutar de la oferta gastronómica en especial la trucha en sus diferentes presentaciones.
