Desde que llegó al Ministerio de Educación el nombre de Ricardo Vélez ha causado gran revuelo en Brasil. Retractaciones y la imposibilidad de concretar un equipo en tres meses lo tienen en la mira de todos. Hace unos días utilizó a Pablo Escobar como un buen ejemplo para combatir contra el consumo de drogas. El narco construyó decenas de canchas de fútbol, lo que Vélez vio con buenos ojos pues "los jóvenes no consumían cocaína porque este producto estaba orientado a la exportación”. No cayeron nada bien las palabras de Vélez e incluso el presidente Bolsonaro tuvo que salir a defenderlo. Sin embargo, los medios brasileños ya ponen en tela la continuidad de Vélez al frente de la cartera de Educación, la más grande de América Latina, porque además se estaría distanciando de su mentor Olavo de Carvalho quien lo recomendó con Bolsonaro.
El colombiano, Mineducación de Bolsonaro que ataca el comunismo en las aulas