Boeing informó este martes que los pedidos por sus aviones se redujeron casi a la mitad en el primer trimestre de 2019 y que entregó menos aeronaves en los primeros meses, comparado con el año pasado, a la vez que enfrenta una suspensión de vuelos en todo el mundo de sus aeronaves 737 MAX tras dos accidentes fatales.
Los pedidos netos, una señal de la demanda futura, cayeron a 95 aviones en el primer trimestre desde los 180 de un año antes. No hubo nuevos pedidos de la referencia 737 MAX en marzo, dijo la compañía.
La caída en las órdenes sugiere que las aerolíneas han adoptado un enfoque cauteloso mientras Boeing busca superar la peor crisis de su historia.
En tanto, las entregas de los aviones tipo 737 cayeron a 89 en el primer trimestre, desde 132 un año antes.
Boeing congeló las entregas después de una suspensión del modelo de fuselaje estrecho tras el accidente de un avión de Ethiopian Airlines el 10 de marzo, el cual provocó la muerte de 157 pasajeros a bordo.
