En uno de los peores años en décadas para la industria automotriz, las ventas de vehículos en Colombia continúan en picada. Como síntoma de esto se suma el cierre de una planta marca en el comercio nacional.
General Motors, la compañía estadounidense que fabrica automóviles, camiones y motores, ha hecho público que cierra sus plantas de ensamblaje en Colombia y Ecuador. En el caso nacional, Colmotores (en el sur de la capital) venía operando al 9% de su capacidad; en el caso de Quito, estaba al 13%, lo cual venía haciendo insostenibles sus operaciones permanentes.
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GM, que es propietaria de Chevrolet, anunció que continúa comerciando automóviles de esta marca en Colombia y Ecuador, pero lo hará importándolos.
El triste proceso de desmontaje de todo el aparato ensamblador inició el 26 de abril, es decir que la operación de clausura es inmediata. En Ecuador será en agosto de este año.
Con este cierre de General Motors son cerca de 600 empleados los que quedan en el aire. Ante esta situación el viceministro de Relaciones Laborales, Edwin Palma Egea, se manifestó en X (antes Twitter) pidiendo tranquilidad.
Este es el más reciente capítulo de la crisis de venta de carros en Colombia: en 2011 la producción alcanzó las 154.000 unidades, en 2021 llegó a menos de la mitad: 62.000. Estos datos confirman la caída que viene siendo sostenida, según se confirma en la Encuesta Mensual Manufacturera con Enfoque Territorial.
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Colmotores comenzó en 1956 y desde allí se armaron automóviles de las marcas Chrysler, Austin, Daewo, Suzuki y la citada Chevrolet.
Este cierre de la planta de General Motors coincide con la que hace justo diez años hizo que CCA dejara de hacer lo suyo con Mazda. Según fuentes del Gobierno, el cierre obedece a condiciones de mercado global y una alta competencia de la empresa automotriz china. Lo cierto es que se cierra una planta insigne del mercado de carros en Colombia y ahora son 600 trabajadores los que quedan en el aire y con el futuro por resolver.