La respuesta es sí, porque tengo claro que, al igual que él, tuve un pasado que no siempre es bueno que otros sepan; porque para poder ser buenos en lo que hacemos debimos haber errado y fallado y el principio de superación del ser humano es levantarse y seguir. Entonces por qué no permitir que otros, que vivieron cosas peores que la mayoría de nosotros, tengan siquiera al oportunidad de brindarle a la sociedad aquello que la sociedad misma les negó: dignidad, respeto y tranquilidad, sin verse enmarcados por ideologías guerreristas que incitan a más violencia.
Es contradictorio, porque NO estoy de acuerdo con lo negociado en La Habana, pero acaso soy tan prepotente para decirle a ese guerrillero raso, que, comparándolo conmigo, somos social y económicamente iguales; que en esta sociedad clasista y arribista los que tienen el dinero y las influencias son los verdaderos verdugos de la verdad, y que esos son los que tienen que pagar con cárcel por sus delitos, porque muchos de ellos, los guerrilleros, solo cumplían ordenes y así no estuvieran de acuerdo, debían cumplirlas. Porque otro gran principio de supervivencia es salvaguardar la vida, pese a mis convicciones morales, ya que en la guerra lo que más se tiene es miedo y ese nos obliga a sobrevivir de cualquier manera.
La vida me permitió estar de frente a guerrilleros, paramilitares y militares, y lo que tenían en común eran dos cosas: sus armas y su temor a morir en un enfrentamiento. Pero cada uno de ellos tenia sus razones para estar en el bando que estuvieren, fuesen buenas o malas; la gran verdad es que estaban allí por otros que consideraban sus líderes, quienes los enviaban a matarse.
La promesa de paz que hoy en día tenemos es una encrucijada moral para la mayoría, pero lo que sí tengo claro es que moralmente todos merecemos una segunda oportunidad y más cuando nuestros errores fueron motivados por los verdaderos criminales (esos que usan corbata y nunca se ensucian las manos de sangre).
Y sí, sí trabajaría con un reinsertado porque tengo la capacidad de verlo como un compañero de labor, ya que lo que menos haría es indagar en sus recuerdos para tener la arrogante excusa de discriminarlo por lo que creo pudo haber hecho.
@dragoxtrem
