Señor Álvaro Uribe, la Universidad de Caldas se respeta y punto.
La estigmatización por parte de los políticos a la universidad pública en Colombia no es un tema nuevo. La Ley 30 de 1992 se ha encargado de asfixiar presupuestalmente a la Universidad de Caldas y a todas las IES públicas del país, obligándolas a la consecución de recursos propios, que no es más que la privatización de lo que debería ser un derecho fundamental de los colombianos.
Germán Vargas Lleras junto con Iván Duque han defendido y seguirán defendiendo un modelo en donde predomina el interés privado por encima de las instituciones de educación superior públicas. Ni hablar del Congreso de la República, apoyando la financiación contingente al ingreso.
Germán Vargas Lleras, malo. Iván Duque, malísimo. Congreso de la República, terrible.
Álvaro Uribe Vélez, malo, malísimo, terrible y también peligrosísimo.
Senador, no venga a decirnos que los docentes de la Universidad de Caldas vienen a desviar las mentes de los estudiantes. Soy estudiante y activista de la Universidad de Caldas y le garantizo que nuestra institución cuenta con profesoras y profesores que hacen un acompañamiento en el proceso de formación profesional, humano y político de las personas. Muchos de estos hacen parte de nuestra institución por amor a la docencia y por un compromiso social con nuestra sociedad. Ellos continúan dando sus cátedras, aunque gracias a politiqueros, como usted, la mayoría tenga un trabajo por prestación de servicios y no un trabajo digno como lo merecen.
Yo no sé qué profesores tuvo usted en su infancia, ni tampoco quisiera conocer alguno, qué vergüenza. Mucho menos quisiera leer los mismos textos que imagino usted algún día leyó dos veces, no quiero leer a Hitler, Mussolini o Pinochet.
Uribe solo le digo una cosa: los docentes y la comunidad de la Universidad de Caldas se respeta. Retráctese de sus palabras y pida perdón, ya la Farc lo hizo, ahora le toca a usted. Para finalizar le comento: “Sí, para muchos estudiantes usted no es bienvenido en nuestra universidad, aquí no queremos personas que desconocen a los verdaderos héroes de la patria y condecoran a otros”.
Uribe, retráctese, la Universidad de Caldas se respeta.
