El encuentro entre Álvaro Uribe y el padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, comenzó con el expresidente poniendo sobre la mesa su posición: La Comisión de la Verdad, entidad nacida del Acuerdo de Paz entre las Farc y el gobierno colombiano, es ilegítima, pues los promotores del NO en el plebiscito de 2016 no fueron reconocidos, según Uribe. Con esa claridad, el expresidente comenzó su intervención haciendo referencia a los 61 puntos que preparó en un documento al que llamó Falsos Positivos y Seguridad Democrática. De Roux, acompañado de los comisionados Lucía González y Leyner Palacios, escuchó atentamente la explicación de Uribe sobre las ejecuciones extrajudiciales que ocurrieron durante su gobierno.
Aunque en un principio el encuentro entre Uribe y De Roux sería privado, por una decisión a último minuto del expresidente, su equipo de comunicaciones comenzó a transmitirlo en vivo por sus redes sociales. Uribe también aprovechó para repetir lo que ha venido afirmando en estos años desde que se conocieron los falsos positivos: él nunca dio una orden expresa, pero fue un presidente que sí pidió resultados. "La culpa nunca es de quien exige resultados".
El expresidente reafirmó su rol en el conflicto armado. No reconoció ninguna responsabilidad y en cambio ha exaltado las labores de su gobierno de Seguridad Democrática. Además, fue duro con la comisión al señalar que esta viene promoviendo un juicio y no un relato de la guerra. En los próximos días la comisión pondrá en revisión la comparecencia de Uribe para analizarla.
Te puede interesar:
Los puntos con los que Uribe espera a la Comisión de la Verdad