En septiembre, el alcalde de Medellín y el expresidente iniciaron una acalorada pelea en Twitter que terminó en demando. Uribe tildó de ladrón y deshonesto a Daniel Quintero que supuestamente era apoyando por "combos violentos". Ante las fuertes declaraciones, el alcalde puso una tutela para que Uribe se retractara sobre sus afirmaciones que afectaban su buen nombre y honra. Sin embargo, el Juzgado 24 civil municipal de Medellín declaró la tutela como improcedente y le recomendó al alcalde buscar otro mecanismo para reclamar los derechos que le son vulnerados.
Además, el juzgado declaró que la pelea entre Uribe y Quintero tenía tinte de debate político que evidentemente no era propio del escenario de un tutela. Ante la respuesta, el alcalde de Medellín declaró que apelará la decisión y calificó de penosos los argumentos que Uribe expuso ante el juez pues declaró que se sintió bajo presión y la libertad de expresión le permite llamar ladrón al que quiera.
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