En los últimos días, la ciudad de Medellín ha estado sumida en un escándalo por el programa Buen Comienzo. A muchas de las personas que venían trabajando en este programa se les terminó el contrato y al parecer no hubo renovación; lo cual llevó a que se manifestaran en las calles, pidiéndole al alcalde Daniel Quintero la renovación, asegurando que el mandatario cambió las reglas del juego a último minuto.
Quintero ha expresado que esta medida corresponde a irregularidades que se han visto en la contratación de Buen Comienzo e inconsistencias que venían desde hace años, con oferentes que no estaban lo suficientemente capacitados para brindar esta actividad. Lo extraño en todo este caso llega cuando empezamos a realizar un seguimiento a este tema y vemos quiénes podrían estar involucrados en el escándalo de Buen Comienzo:
Durante este primer año de gobierno del alcalde Daniel Quintero, el expresidente y exsenador Álvaro Uribe Vélez no había realizado pronunciación alguna, aun cuando se gestaron el año pasado los primeros pasos de una revocatoria en contra del mandatario. No obstante, al parecer al expresidente le incomodó que Quintero tocara el programa Buen Comienzo.
Desde el primer momento que el mandatario local empezó con las modificaciones a este programa, el exsenador Uribe empezó a trinar, como bien lo hace, en contra de las medidas del alcalde. Pues bien, en las últimas horas, Álvaro tuiteó asegurando que la “fundación Golondrinas, excelente calificación en trabajo con los niños, la dejan por fuera de Antioquia y de Córdoba por tiempo de experiencia (…) Por Favor Alcaldía…”.
Así el expresidente estaría demostrando que le preocupa algo con los cambios que se están dando en la contratación de Buen Comienzo. ¿Quizá es porque durante muchos años él y los suyos se han beneficiado de él? Además, Álvaro Uribe Vélez también pidió revisar las condiciones de contratación del programa. Al parecer le tocaron la llaga del jefe del Centro Democrático, el cual, al parecer, anda jalando orejas dentro de la bancada del concejo para que realice presión política y no se deje quitar el programa.
Lo extraño acá es que el expresidente durante todo un año no se había manifestado en temas de ciudad. Todo indica que ya se empieza a saber quiénes están detrás de los intereses políticos y económicos del programa. Esperaremos a ver en qué resulta la denuncia que interpuso hoy la Alcaldía de Medellín por irregularidades que encontró con la contratación de este programa.
