Sin renunciar a nuestros sentimientos nacionales, los latinoamericanos nos sentimos concernidos en una especie de nacionalismo continental. Personalmente he llegado a un punto en que siendo colombiano y sin renunciar a serlo, me daría lo mismo ser de cualquier país siempre que fuera latinoamericano. Es que si nos pusiéramos a hablar de las diferencias entre nuestros países, nos tocaría ponernos a cortar más delgado y hablar entonces de las diferencias entre una región y otra. Somos y nos sentimos cada vez más latinoamericanos.
Gabriel García Márquez
La pregunta que nos debemos hacer los colombianos en estos momentos, es la siguiente: ¿Colombia es un Estado soberano?
Después de la independencia en 1810, hemos tenido periodos de incertidumbre y hasta una época de Patria boba, durante casi seis años, en los cuales la Nueva Granada navegaba al garete, sin rumbo y sin horizontes claros y definidos.
Cada provincia quería tener su propia gobernabilidad e independencia. Posteriormente, viene la época neogranadina, de 1832 hasta el año de 1863, cuando los estados soberanos se unen y se federalizan, formando una nación libre, soberana e independientebajo el nombre d e los Estados Unidos de Colombia, hasta el año de 1885 que empezamos a llamarnos República de Colombia.
En nuestra Constitución de 1991, se estableció en el Artículo 1. “Colombia es un Estado de derecho, organizado en forma de República unitaria, descentralizada, con autonomía, etcétera. Y el Artículo 3- nos dice: “La soberanía reside exclusivamente en el pueblo, del cual emana el poder público. El pueblo la ejerce en forma directa o por medio de sus representantes, en los términos que la Constitución así lo establece”. En nuestra Constitución Política en letras de molde se ve muy bien, y cuando se lee, se escucha muy bonito, pero la realidad, de acuerdo con los hechos es otra.
Durante muchas décadas los Estados Unidos han influido en nuestros asuntos internos, a través de ayudas, tratados y acuerdos de cooperación.
Esas épocas están cambiando, y mas aceleradamente con la llegada del presidente Gustavo Petro, quien quiere abrir mercados y cooperación con otros países como Rusia, China, Turquía y Venezuela entre otros.
Es tan evidente la injerencia estadunidense en Latinoamérica que el senador norteamericano, por el estado de Virginia y exfuncionario de la Otan , Richard Black, declaró que "tienen que terminarse las operaciones de cambio de régimen que ha emprendido Estados Unidos contra Venezuela y también en otros países del continente americano, y las sanciones que están provocando “sufrimientos inimaginables” a mucha gente deben ser derogadas”.
Estados Unidos ha “satanizado” la moneda venezolana, haciéndola “inservible”, y luego decimos: ‘Miren, qué mal gobierno es este, su moneda no vale nada’. Y no fueron ellos los que la hicieron inservible, sino que “nosotros hicimos que no valiera nada”, argumentó Black.
“Luego, tenemos un bloqueo, de hecho, a sus exportaciones petroleras... y entonces decimos: ‘ Pero fíjense, no pueden dar de comer a su población’. Y ¿saben que?, no pueden dar de comer a su población porque nosotros hemos cortado toda su fuente de ingresos”señaló.
En su primera salida internacional a Chile, el presidente Colombiano Gustavo Petro emprendió la tarea de buscar la unidad latinoamericana y aseguró que para la región es "hora de dejar atrás los bloques, los grupos y las diferencias ideológicas para trabajar juntos", con Boric habló de relanzar la Comunidad Andina y fortalecer la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
"Hemos hablado particularmente de revitalizar la Comunidad Andina (...) que tuvo en las épocas del pensamiento económico de la Cepal un papel muy importante en la planificación de los procesos de industrialización de nuestros países", dijo Petro en una rueda de prensa conjunta tras la reunión bilateral con Boric.
Al conmemorarse el Día de la Unidad Latinoamericana y del Caribe, se rescataron la importancia de los sueños de integración que tenía el Libertador Simón Bolívar en el Congreso Anfictiónico que se instaló en Panamá el 22 de junio de 1826.
Entre los líderes contemporáneos que siguieron la línea de la integración latinoamericana, destacan entre otros Dilma Rouseff, Hugo Chávez, Fidel Castro, Cristina Fernández de Kirchner y José Mujica
Mientras que los Estados Unidos sigan actuando con su política neocolonial en la América Latina, considerando que estas naciones son su patio trasero, van a seguir perdiendo terreno e influencia, que han tenido desde el siglo IX y a lo largo del siglo XX , durante los cuales los estadounidenses disfrutaban de una autoridad incuestionable en estos países.
Venezuela, Colombia, Argentina, Brasil, Bolivia y Chile están tratando de seguir una política independiente activando alternativas al predominio estadounidense.
prensainternacional50 @ gmail.com