La fortuna de Hernán de Jesús García, quien fue uno de los dos dueños de Pesquera Jaramillo, famoso restaurante de comida de mar en Bogotá, supera los $5 mil millones y estuvo embolatada durante más de siete años.
La semana pasada, el Juzgado 30 de Familia cerró el complicado caso y el juez le entregó la millonaria herencia a Stefanía García Montagut, única hija y heredera de Hernán de Jesús, el propietario muerto en extrañas circunstancias a comienzos de marzo de 2006.
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El cuerpo sin vida de García lo encontraron en la habitación principal del apartamento donde vivía solo el barrio Chicó, en el norte Bogotá. Quien halló el cadáver con un disparo en el lado izquierdo de la cabeza fue la empleada del servicio doméstico.
La víspera, el empresario le había pedido a la empleada que no fuera a trabajar y se tomara unos días de vacaciones porque él se iría a un largo viaje. La mujer no le hizo caso. Al día siguiente llegó muy temprano como era su costumbre y vio el cuerpo ensangrentado de su jefe. A su lado había una pistola 9 milímetros. Las investigaciones arrojaron que se trató de un suicidio.
Nueve meses después de lo que las investigaciones consideraron como un suicidio, repartir la herencia se complicó. El hermano sobreviviente y copropietario de la Pesquera Jaramillo que ambos heredaron de sus padres, instauró una demanda en contra del juicio de sucesión por la herencia de Hernán de Jesús.
La demanda que impidió la entrega de la herencia fue sustentada con una letra de cambio por $1.100 millones, aparentemente firmada por Hernán de Jesús dos días antes de su suicidio. El documento estaba a favor de Dagoberto Díaz Barreto, exalcalde de Carmen de Apicalá y excandidato al Senado por el Partido de La U.
Tras la demanda, la hija del fallecido dueño de la pesquera, aspirante a modelo y radicada en Francia, contrató al abogado colombiano Mauricio Bertoletti Laguado para defender los bienes que su papá tenía en el país. El proceso duró bastantes años.
Las investigaciones constataron que la firma que aparecía en la letra de cambio con la que pretendían apoderarse de mil millones de la herencia, no había sido hecha por Hernán de Jesús, tampoco había registro de la entrada de esa cantidad de dinero a las cuentas personales o empresariales del fallecido.
Todos los conocidos del dueño de la Pesquera, como su hermano, los empleados de confianza y amigos, declararon no saber de la cercanía del exalcalde del municipio tolimense con el empresario. Las pruebas determinaron que la letra de cambio era falsa y, al parecer, el político quería aprovecharse de la difícil situación de los García, herederos de un gran negocio y uno de los más antiguos de Bogotá.
Después del intento fallido del político por quedarse con parte de una herencia que no le correspondía, Stefanía recibió el 40 % del negocio que fue de su padre y las propiedades que tenía a su nombre.
Pesquera Jaramillo fue fundada en 1934 por la señora Mercedes González y su esposo, padres, de Hernán de Jesús y Henry. En esos años 30, los nuevos empresarios se asociaron con un paisa de apellido Jaramillo lo que dio origen al naciente negocio, que fue el primer establecimiento que introdujo el pescado de mar en los platos gourmet en Bogotá.
En ese entonces, los capitalinos estaban acostumbrados a comer solo peces de río Magdalena que llegaban de los municipios cercanos. Posteriormente, el exitoso negocio de la Carrera octava con Calle 22 que sigue hoy en el mismo sitio, quedó solo en manos de la familia Gómez González y es reconocido por sus hamburguesas de pescado.
Dicen que una de las posibles razones del suicidio de Hernán de Jesús fue precisamente la tristeza que le causó el fallecimiento de doña Mercedes en 2014. Eran muy cercanos, él era inestable emocionalmente y entró en depresión.
Aunque siempre se le veía acompañado con hermosas mujeres, exreinas de belleza y modelos, la persona más cercana era su hija Stefanía, quien vivía en París desde que se rompió la relación entre su papá y su mamá, María Eugenia Montagut. La decisión judicial la reconoce como heredera y Pesquera Jaramillo sigue siendo un negocio familiar.
Henry García, hermano de Hernán de Jesús y tío de la modelo, tiene el 55 % del negocio, su hijo Juan Camilo García es propietario del 5 % y la nueva dueña, Stefanía García, se quedó con el 40 %, de un negocio que vende $15 mil millones anuales y defendieron durante siete años de un político que quiso aprovechar la muerte de su padre Hernán de Jesús para quedarse con su patrimonio y ganancias anuales cercanas a los $1.000 millones.
