La exfical Tatiana Oliveros no es una presa cualquiera. Atractiva y extravagante como Aída Merlano, es una de las once condenadas que permanecen en el exclusivo Patio 8, donde son tratadas de manera especial, distinto al de las otras 2000 reclusas de la cárcel el Buen Pastor. Allí cuentan con baños individuales, cocinetas, televisoras, hornos microondas y lavadoras. Están condenadas por delitos asociados al poder, tráfico de influencias, chuzadas, corrupción. Una de ellas era Aída Merlano con quien se volvió una de sus mejores amigas, tanto que ambas celebraban fiestas adentro como lo evidencia esta fotografía e incluso, Oliveros habría tenido que ver con el escape de Merlano.
¿Quién era Tatiana Oliveros? En el momento en el que los hombres del CTI entraron a la oficina de la fiscal Tatiana Oliveros en el centro de Neiva en la tarde del 2 de diciembre del 2012, la encontraron rompiendo en una máquina eléctrica todos sus expedientes judiciales. También, estaban documentos que probaban su intención de sobornar a la justicia para que la absolvieran de los cargos que la acusaban: concierto para delinquir con fines de narcotráfico, falsedad, peculado y prevaricato por haber sido cómplice de uno de los jefes de los urabeños.
Si, Jairo de Jesús Durango Restrepo, mejor conocido por su alias de "La Guagua", fue dejado en libertad inexplicablemente en el 2011 al igual que su compañero de la organización, Daniel Alejandro Serna, alias "Kerner", quien era uno de los hombres de confianza de Don Berna en Medellín. Pero no eran sus únicos pecados, conocida como “La fiscal que espiaba al Fiscal” se le acusa de haber infiltrado la seguridad y los pasos del exfiscal general Eduardo Montealegre tras haber tenido una relación amorosa con uno de los guardaespaldas del alto funcionario.
Una vez la capturaron la llevaron al patio 8 del Buen Pastor. Aunque ese penal tiene una población de más de 2.000 reclusas y el sobrecupo es tema diario, en el patio en el que está Tatiana Riveros solo hay 11 reclusas. Allí se encuentra.
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