Nacido en Medellín, pero de padres y familia extranjera, Woods Staton cuenta con una de las historias empresariales más sorprendentes de Colombia, puesto que supo armar un emporio que no solo le ha permitido facturar miles de millones, sino también ser el dueño de una de las empresas más grandes del mundo y que es reconocida como tal. Algo que no sería posible sin una de las multinacionales más conocidas del mundo como lo es McDonald's, compañía que inspiró el nombre de su Arcos Dorados con la que manejas las franquicias de la hamburguesería en más de 20 países de Latinoamérica.
El último reconocimiento para Staton llegó recientemente por cuenta de la consultora y auditora británica EY, la cual, en conjunto con la universidad St. Gallen de Suiza, elaboró un índice sobre las 500 empresas familiares más grandes del mundo, para lo cual se basó en los ingresos anuales. Allí, Arcos Dorados ocupó el puesto 441, siendo la mejor entre las únicas dos colombianas que se metieron en la clasificación. La otra fue el Grupo Aval de la familia Sarmiento, la cual alcanzó a colarse en la posición 490.
Por su parte, la parte alta del ranking estuvo copada por empresas estadounidenses, entre las cuales se impuso la cadena de tiendas Walmart de la familia Walton. A ella le siguieron dos alemanas como Volkswagen y Schwarz y otras dos estadounidenses como Cargill y Ford cerrando el top 5.
Una historia que pudo no haber sido contada por cuenta de Pablo Escobar
La idea de traerse McDonald's a Latinoamérica surgió en la década de los 80s. Staton quería poner una franquicia en Colombia y de eso alcanzó a hablar con el presidente de ese entonces de la multinacional de hamburguesas. Sin embargo, esto no terminó siendo posible por la oleada de violencia que se estaba viviendo en el país en el que Pablo Escobar era rey.
Pero, esto no lo frenó, sino lo contrario, puesto que rápidamente decidió poner rumbo a Argentina. Se estableció allí y fue por esos lares que finalmente terminó llevando a McDonald's por primera vez. Ya luego de muchos años sí terminaría trayéndola a Colombia, pero también a 20 países más de la región como Ecuador, Perú, Brasil, entre muchos otros.
Aunque el movimiento definitivo lo terminó dando fue en 2007 cuando la cadena norteamericana pensaba dejar América Latina. Entonces, Staton reunió a un grupo de inversionistas que con USD 700 millones armaron la sociedad Arcos Dorados que hoy es una gigante de la industria de los alimentos.
El paisa compagina este gran negocio con otros tantos, incluidos varios en uno de sus ciudades favoritas en el mundo: Cartagena. Allí es dueño de varios hoteles como el Casa San Agustín y además constituyó hace siete años la Fundación Centro Histórico de Cartagena, desde la cual tiene el radar puesto en los movimientos de compra, venta y alquiler predios en la ciudad amurallada.
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