¿Un colombiano tras la escalofriante desaparición de 28 mineros en Venezuela?

¿Un colombiano tras la escalofriante desaparición de 28 mineros en Venezuela?

Nadie da razón sobre la suerte de los trabajadores, el periódico que informaba que fueron masacrados por la banda de un colombiano y la Guardia Nacional, fue sorpresivamente cerrado

Por:
marzo 13, 2016
¿Un colombiano tras la escalofriante desaparición de 28 mineros en Venezuela?

La diputada de oposición María Corina Machado  –una de las voces con más eco en Venezuela– se presentó esta semana ante la Asamblea Nacional con una cinta oscura en su antebrazo izquierdo: “Este brazalete es por los 28 mineros desaparecidos en Tumeremo. A sus familias: no están solos, ¡no se callen!”, dijo, y replicó la frase en su Twitter, a casi tres millones de seguidores. Por más de una semana estas preguntas sin respuesta, ni resonancia en los medios oficiales, gravitan en Venezuela: ¿Qué fue de los 28 mineros desparecidos? ¿Si terminaron asesinados, dónde están sus cadáveres, y quién lo hizo? ¿Por qué nadie escucha a las familias de los desaparecidos, qué oculta el Servicio Nacional de Inteligencia y la Guardia Nacional Venezolana?

Las preguntas se originaron en Tumeremo, una población de 50 mil habitantes al sur del Estado de Bolívar, el pasado viernes 4 de marzo. Los mineros estaban celebrando el hallazgo de una nueva y prometedora beta en una mina aurífera, cuando habrían sido cercanos por cerca de 60 hombres armados, muchos de ellos “de acento colombiano” según el testimonio de algunos sobrevivientes que lograron huir, y que tras esto se han ido por temor a represalias. Antes de marcharse hablaron de un gran tiroteo, señalaron que había un camión, que algunos mineros se les obligó a depositar allí dentro los cadáveres de otros, y anotaron además que el área estaba acordonada por la Guardia Nacional y agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). Desde entonces no sabe qué fue de los mineros.

Familiares y algunos periodistas que han recorrido la zona referida por los sobrevivientes informaron que hallaron “casquillos, pozos de sangre, ropa y pertenencias personales”. La BBC visitó la población y obtuvo el testimonio de un médico del hospital municipal quien aseguró, sin revelar su nombre, que "Los cuerpos de los muertos nunca llegaron a la morgue, parece que los botaron en fosas comunes”.

El Gobernador de Bolívar, Francisco Rangel Gómez, es un chavista consumado y sus declaraciones tampoco han arrojado demasiada luz. Inicialmente comentó que se presumía de un enfrentamiento entre bandas armadas por el control de las minas, y un par de días después trató de restarle gravedad a la situación diciendo que no tenían “ni un solo elemento que nos indique que hay una persona fallecida”. Pero conforme pasaban los días las manifestaciones de las familias aumentaban, bloquearon calles, se tomaron vías nacionales con pancartas y no han dejado de preguntar dónde están sus allegados.

En paralelo al aumento de las protestas el único periódico independiente del sur de Venezuela, el “Correo de Caroní”, venía publicando diariamente reportajes sobre la desaparición de los mineros y las protestas de sus familiares. En sus páginas aparecieron los testimonios de algunos sobrevivientes, la descripción de los criminales, se cuestionó la inoperancia de las autoridades y venían acompañando las protestas de los dolientes. Sus reportajes dan cuenta de una zona minada de impunidad, desgobierno y muerte. El medio además creó la etiqueta #minerostumeremo y así mantuvo el tema presente con fuerza en las redes sociales. Sin embargo, al final de la semana el diario recibió una orden judicial y fue cancelada su licencia. Sorpresivamente fue reactivado un añejo proceso contra el periódico, expediente que había permanecido empolvado por dos años, y en cuestión de dos días se le halló responsable de “difamación e injuria” y se le impuso una pena de 4 años de prisión a su director David Natera, además de una multa superior a los 200 millones de Bolívares, algo así como un millón de dólares.

Correo de Caroní informó insistentemente que el responsable de la desaparición de los 28 mineros sería el jefe de la banda ‘el Topo’, un sujeto llamado Hendry Norberto Bonalde, presumiblemente colombiano, y quien tendría nexos con la Guardia Nacional. Se decía que delinquía en la zona hace varios años tras dejar las filas del paramilitarismo en Colombia y que con él actuaban otros compatriotas suyos. Bonalde figuraba como el tercer hombre más buscado en el Estado de Bolívar hasta mayo de 2015 cuando las autoridades anunciaron su captura, pero en circunstancias poco claras al poco tiempo recuperó la libertad.

Para mayor sorpresa el gobierno de Maduro ahora dice que ya tiene plenamente identificado al jefe de la banda ‘el Topo’ y que se trata ‘Jamiltón Andrés Ulloa Suárez’, quien sería realmente de nacionalidad ecuatoriana aunque bien podría actuar con ex paramilitares colombianos. Por tratarse de una información oficial hay todo tipo de sospechas sobre esta. Basta con decir que junto a este hallazgo, más de una semana después de la desaparición de 28 mineros, el gobierno de Maduro anunció que logró “identificar” a 16 de esas personas desaparecidas, gracias a entrevistas con sus familiares. Un avance que genera más indignación que esperanza.

Twitter: @josemonsal

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
El documental de Netflix sobre los secretos no contados del rescate de los niños perdidos en la selva

El documental de Netflix sobre los secretos no contados del rescate de los niños perdidos en la selva

La canción de Pipe Peláez que Beto Zabaleta que se negó a cantar hasta que ocurrió lo inesperado

La canción de Pipe Peláez que Beto Zabaleta que se negó a cantar hasta que ocurrió lo inesperado

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--