El ultraderechista José Antonio Kast y el izquierdista Gabriel Boric tuvieron un duro cruce al enfrentarse este lunes en un último debate de cara a la elección de segunda vuelta el próximo domingo en Chile.
Es la elección presidencial más polarizada desde el final de la dictadura del general Pinochet. El debate fue bastante tenso, especialmente en los temas de los derechos de las mujeres y la comunidad LGBT+.
Temas sociales
Emplazado durante toda la campaña a hacerse un test de drogas por Kast, el joven diputado de izquierda, de 35 años, sorprendió a su contendiente y a la audiencia al mostrar los resultados de un examen de drogas en el debate televisado.
En la primera parte del debate, Boric leyó una vieja declaración de su rival de ultraderecha en la que había afirmado: "Me costaría que viniera a almorzar a mi casa un amigo gay con su pareja". Intentando demostrar un cambio de postura, el candidato del Frente Social Cristiano aclaró que su hija se había casado y al matrimonio asistieron "parejas de mujeres", aunque minutos después, refiriéndose a la iluminación del Palacio de La Moneda con los colores de la bandera LGBTI, advirtió: "Siempre he señalado que hay sólo una bandera que nos une, que es la chilena".
Kast dio marcha atrás a su idea de terminar con el Ministerio de la Mujer y revertir la ley de aborto terapéutico, entre otras medidas. Sobre este tema, Boric declaró que "cerrar el Ministerio de la Mujer, discriminar por beneficios sociales a las mujeres solteras en detrimento de las casadas, u obligar a una mujer violada a ser madre, ese es el respeto que propone".
Programas económicos
Con la edad mínima para postular a la presidencia, Boric representa a la coalición Apruebo Dignidad, que reúne al Frente Amplio y al Partido Comunista. Kast, del ultraconservador Partido Republicano, se impuso en la primera vuelta del 21 de noviembre y logró alinear detrás de su figura a todos los partidos de la derecha chilena.
Los dos hombres también difieren en sus programas económicos. En la izquierda, Gabriel Boric, de 35 años, promete avanzar hacia un estado de bienestar, hacia más derechos sociales. Sin embargo, moderó sus propuestas y disminuyó de 8 a 5% el porcentaje de recaudación de PIB de la reforma tributaria que impulsará para financiar la ampliación de programas sociales.
Frente a él, José Antonio Kast defiende el modelo neoliberal heredado de la dictadura de Augusto Pinochet y promete reducir el papel del Estado en la economía: "Cuando decimos que vamos a reducir los impuestos a las empresas, eso crea crecimiento, y si hay crecimiento hay más empleo y más digno", afirmó.
El candidato de extrema derecha también hizo varias afirmaciones falsas y acusó a su competidor de estar manipulado por el partido comunista. Concluyó el debate dando gracias a Dios.
Las encuestas muestran a los dos candidatos casi empatados. Este domingo, más de 15 millones de chilenos están convocados a votar para escoger al sucesor del conservador Sebastián Piñera, en medio de la redacción de una nueva Constitución. En la primera vuelta la participación fue de apenas 47% del electorado.
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