Hace más de ocho años el Hospital Universitario del Valle está sumido en una crisis financiera debido a las políticas mercantilistas que sobre la salud han puesto los gobiernos de turno, especialmente el de Juan Manuel Santos y Ubeimar Delgado. actual gobernador del Valle; su pilar ha sido la privatización, la cual hoy tiene en aprietos al único hospital público de nivel tres del suroccidente colombiano.
Una de las causas principales de este colapso financiero son las diversas deudas que tienen las EPS con el H.U.V. que ascienden a más de 200.000 millones de pesos: Emssanar adeuda $25.000 millones, Coosalud $6.000 millones, Salud Cóndor y Calisalud $17.000 millones, estas últimas liquidadas por el municipio de Santiago de Cali, por su crítica situación. Dichas EPS han recibido beneficios por parte de Santos; en primera medida, el gobierno se cruza de brazos para cobrar la deuda de 5.5 billones de pesos que tienen las EPS con la red pública hospitalaria del país y, en segunda medida, tramitando una ley estatutaria de salud que le entrega en bandeja de plata la prestación de este derecho.
Lo más preocupante es que hace unas semanas se informó en la Asamblea Departamental del Valle que el Hospital Universitario pasó de riesgo fiscal medio a alto, lo cual señala que las medidas agenciadas por el actual gerente del Hospital, Jaime Rubiano, en compañía de Ubeimar Delgado y el Ministerio de Salud, no han sido efectivas. Por el contrario, han traído graves consecuencias financieras, en la calidad de atención para los usuarios y laborales para los trabajadores del centro hospitalario. Una de las medidas implementadas ha sido la de establecer alianzas público privadas, con las que se ha entregado las áreas más rentables del H.U.V. a privados. Estas alianzas han sido tan lesivas que en septiembre del año pasado la Contraloría hizo una función de advertencia sobre estos contratos de tercerización que, en ultimas, no resolvieron la situación financiera del H.U.V.
La bandera de la privatización y tercerización se materializa en la entrega del manejo de pacientes accidentados a través del SOAT a Sanos S.A, área que tiene facturaciones de más de 6.000 millones de pesos. La farmacia fue entregada a Valle Farma, las imágenes diagnósticas, el área de hemodinamia y angiografía se le entregó a la empresa Miocardia S.A, la cirugía digestiva bariátrica y la resonancia magnética fue entregada a la Clínica San José, y entre otros servicios que hacen parte de la lista de tercerizados son la Unidad de Cuidado Intensivo Coronario y Cirugía Cardiovascular. La última APP considerada fue el área de facturación que, de cerrarse el negocio, se hubiera constituido la sexta área entregada a privados, pero eso no es todo: aparte de entregarle estas unidades, a los privados se les debe por su intermediación entre 15.000 y 20.000 millones de pesos.
El Hospital se convirtió en un nicho de privatización y politiquería donde el actual director, Jaime Rubiano, ha seguido a pie de letra las directrices de Ubeimar Delgado, el Ministerio de Salud y Santos, los cuales gobiernan a favor del negocio de las EPS a quienes se les entrega la salud y vida de los colombianos, mientras cientos de hospitales públicos del país seguirán cerrándose. Por ello, hago un llamado a toda la comunidad vallecaucana y universitaria a defender el H.U.V. el cual es la más importante entidad de salud a nivel departamental y el sitio de prácticas de nuestros estudiantes de la Universidad del Valle. Denunciemos el talante privatizador del gobierno de Santos, Ubeimar y sus amigas las EPS, por ser los responsables del colapso financiero del H.U.V.
¡En Univalle somos más los que defendemos el H.U.V público, de calidad, libre de EPS y plenamente financiado por el Estado!
