Guadalajara, la segunda ciudad de México, capital del estado de Jalisco y sede de varios encuentros culturales con participación internacional, ha recibido en años recientes la visita de personajes procedentes de Turquía. La buena relación entre turcos y mexicanos logró el establecimiento de la Casa Turca, en el año 2015, que se ha convertido en un espacio para fomentar la amistad y el conocimiento de la historia, la cultura y la vida del pueblo en esa hermosa nación donde alguna vez se estableciera el Imperio Otomano, como nos enseñaron los profesores de la llamada historia universal.
Al comenzar el mes de diciembre del 2018 fue notoria la presencia de la empresa editorial turca Risale-i Nur que a través de La luz de la fe, ofrece libros sobre la religión islámica en más de 60 idiomas. En el pabellón (stand) marcado con el número NN10 dentro del edificio Expo-GDL y con ocasión de realizarse la edición número 32 de la Feria Internacional del Libro Guadalajara-México (2018), los promotores de publicaciones turcas, Abdullah Ozen, representante para los países de Nuestra América y Abdullah Rojas, invitaron a las y los lectores a leer diferentes títulos, entre los que destacan: El signo supremo; La resurrección y el más allá; Luz para los enfermos; Palabra Veintitrés y Ramadán, Frugalidad, Agradecimiento.
Abdullah Ozen disfrutó su presencia en la FIL de Guadalajara y desea volver. Muchos estudiantes, académicos, trabajadores, amas de casa, bibliotecarios, editores, se acercaron al pabellón turco e intercambiaron ideas y conceptos sobre las obras. El amigo Abdullah Rojas, de origen peruano, explicó con paciencia y cordialidad la importancia que tiene El Corán en la vida de los musulmanes. Recordó que en Turquía viven también cristianos y judíos. Las relaciones entre las diferentes confesiones son, al igual que en la República Islámica de Irán, fraternales, porque Dios, llama en su ,ensaje a judíos, cristianos y musulmanes, gente del libro.
Entre tantas publicaciones, escritores y lectores, el pabellón de la empresa turca estuvo cerca del espacio destinado a la República Oriental del Uruguay, igualmente visitado durante la fiesta de las palabras, edición número 32, que recién culminó.