Aunque era un secreto a voces, que Trump obtuvo la victoria gracias al apoyo del voto hispano, así lo demuestra el análisis realizado por Mark Penn y Andrew Stein, dos experimentados asesores del partido demócrata..
“El resurgimiento de Trump tiene una causa que ha sido ignorada por unos e ignorada por otros: la clave fue el voto latino”, afirmó Penn, frente a los medios, haciendo un análisis frío sobre el particular.
Penn fue el consejero y analista de datos de las campañas presidenciales de Bill y Hillary Clinton, entre 1995 y 2008. Hoy día es el director de Encuestas Harry y director de Stagwell Inc.
Según Stein, quien fuera presidente del Concejo de Nueva York, entre 1986 y 1993, “Joe Biden aventajó a Trump por 23 puntos, 65% a 32% en 2020. Cuatro años más tarde, Kamala Harris obtuvo soplo cinco puntos sobre Trump 51% frente a 42%”.
De acuerdo con los dos expertos, esos 18 puntos de ventaja (dentro del voto hispano), fueron mucho más amplios que los dos puntos que Trump ganó frente al voto de los negros, o los 12 puntos más que le dieron los asiáticos.
Por otro lado, Penn considera que el voto latino fue el voto decisivo para que Trump ganara en los estados péndulo, los estados que deciden las elecciones en Estados Unidos. “Trump triunfó en Michigan, gracias al voto de los latinos”, afirmó.
“Pero, los republicanos también mejoraron la votación entre todos los electores de los estados morados (péndulo), excepto Carolina del Norte y Wisconsin”, aseguró Stein.
También destacaron que en los estados de California y Nueva York, dos de los bastiones políticos de los demócratas, estos apenas derrotaron a Trump en lo referente al voto latino por 9 puntos en California y un poco más de 10 puntos en Nueva York, algo casi inconcebible hace una década.
El informe de los dos experimentados asesores del partido demócrata concluye diciendo que, “si el voto latino no se hubiera movido (hacia Trump), la señora Harris hubiera ganado la elección con 293 votos electorales”.
“Los latinos son la población que más rápido está creciendo y ya demostraron que pueden definir una elección”, aseveró Stein.
“Pero ninguno de los dos partidos puede ya tomarlos por seguro”, concluyó Penn.
También le puede interesar: Bogotá sepultada por la basura: el fracaso de un contrato millonario