Durante diez días Cali recibirá a cerca de 20 mil personas en torno a actividades en espacios públicos, plazas y recintos cerrados, como una gran feria alrededor del tema de la biodiversidad y la protección del medio ambiente. Emprendedores con productos de economía verde, artistas, comparsas, académicos y especialistas se tomaron la ciudad, siendo esta la gran novedad de la Cop16, que se salió del gran centro de Convenciones del Pacifico, donde funcionarios representantes de gobiernos discuten en reuniones cerradas las políticas públicas para lograr contener la destrucción del planeta.
¿Quiénes estuvieron detrás de este monumental esfuerzo para darle vida a la Cop de la gente?
Lo cierto es que fue necesario un trabajo cooperativo entre varias organizaciones para que esto fuera posible, empezando por la Alcaldía de Cali, hoy con Alejandro Eder al mando. La funcionaria que asumió la gerencia en la ciudad fue la abogada oriunda de Buenaventura, Angélica Mayolo, quien fue secretaria de Desarrollo Económico en la Alcaldía de Maurice Armitage, Ministra de Cultura durante un año en el Gobierno Duque y quien fue un respaldo clave para Eder incluso desde antes de que se anunciara la sede de la Cop16. De igual manera, la Alcaldía ha recibido la asesoría de la economista Michelle Morales, quien trabaja para el Banco Interamericano de Desarrollo y quien, además, lidera la logística de la Zona Azul.
Otra entidad clave para la organización ha sido la Gobernación del Valle del Cauca, cuya cabeza, Dilian Francisca Toro, tiene un asiento en el Consejo Directivo del evento. Su mano derecha en todo este proceso ha sido la economista María Leonor Cabal, quien es asesora de su despacho y a quien le delegó la coordinación de todo lo referente a la Cop16.
Por el lado del Gobierno nacional hay dos personas que han destacado particularmente, ambas funcionarias del Ministerio de Ambiente que dirige Susana Muhamad. En primer lugar, está la ingeniera industrial Paula Douat, quien desde abril fue nombrada como gerente de la Cop16 gracias a su amplia experiencia en Procolombia y otras entidades y en el segundo, está Felipe Cobo, un internacionalista al que le delegaron ser el líder logístico del evento.
Finalmente, entran en juego las organizaciones internacionales, con dos funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que han puesto el pecho. Estos son David Cooper, un canadiense experto en biodiversidad agrícola que fue clave para la elección de Colombia como sede y que está a cargo de verificar que se cumplan las especificaciones que pide el Convenio de Diversidad Biológica y Nader Ibrahim, un egipcio que fue delegado para apoyar el tema logístico.
También le puede interesar: Cómo una escuela de carreras intermedias escaló para convertirse en una universidad que pesa
