Basta con estar parado a las 5 de la tarde en San Juan con Ferrocarril o a la 1 pm subiendo las Palmas para darse cuenta que la movilidad en Medellín esta cada vez peor.
Desde las dependencias administrativas se han lanzado estrategias para mitigar el impacto generado por los vehículos optimizando ciclos semafóricos, ampliando vías e incentivando la " movilidad sostenible". Pero el problema no es este, el problema es que puedes comprar tu carro con la cédula de ciudadanía y no solo en concesionarios sino también en centros comerciales y terminales de transporte.
Es que por cada medida que se toma para bajar a los usuarios, se inyectan miles de nuevos usuarios mensuales sobre las vías de Medellìn, pero ¿cómo disuadir a un usuario que compre un automóvil? pues sencillo: afectando la percepción que éste tiene del gasto que le implica un auto tanto económico, como en tiempos de demora, percepción de la seguridad y comodidad versus otro modo que le ofrece lo mismo y mucho más barato como podría ser el transporte público.
La gente que compra automóvil considera en sus gastos mensuales aproximadamente 350 mil pesos, pero no considera el pago de seguros, mantenimiento y/o multas que pueden ascender a mas 2 millones por año. Estos gastos, al no ser percibidos, no afectan su decisión en la compra de un vehículo ya que, al menos, saben que irán cómodos. Además, antes se tenía la percepción que el carro era accesible para estratos 4, 5 y 6. Sin embargo, ahora con créditos tan bajos del mercado, son los estratos 1, 2 y 3 quienes mas compran vehículos, ¿porque lo gente lo hace?
1. Por facilidad de acceso a créditos.
2. Porque los gastos en tiempo y dinero si se tomaba un bus son casi los mismo según lo que percibe el usuario
3. Porque el bus no llegaba hasta donde vivían o trabajaban
4. Por el llamado estatus social.
Ahora bien, para desmotivar la compra de estos vehículos se deberá tomar dos consideraciones
1. Mejorar los buses, hacerlos más cómodos y profesionalizar a sus conductores
2. Cobrar cero pesos por su uso
¿Cero pesos? se preguntará; la respuesta es si. El bus gratuito en ciudades como Medellín, donde el carro es el eje estructural de la movilidad, es inminente para que el usuario quite la variable costo para tomar la decisión de en qué modo de transporte moverse.
El transporte público en bus y metro deberá ser considerado como un servicio público al igual que la luz, agua, gas y deberá pagarse con los impuestos de quienes siguen manejando y del bolsillo de todos nosotros.