Recortar el pago de la prima de mitad de año o pagarla a plazos: esa es la propuesta que hacen algunos gremios como la Andi, Fenalco y Acopi. Sostienen que el pago de dicho beneficio supera los siete billones de pesos y no hay capacidad económica para pagarles a los empleados.
Mientras el Estado colombiano contempla la idea del no pago oportuno de las primas de los trabajadores, el gobierno nacional gasta millones de pesos con cifras exorbitantes para el mejoramiento de la imagen del presidente Iván Duque y en otras inversiones que poco benefician a la ciudadanía.
Sin duda alguna, no pagar las primas en épocas de pandemia es la opción menos salomónica, porque la gente necesita plata para solventar las necesidades básicas y porque nadie les puede arrebatar lo que por ley les corresponde. Lo paradójico de la crisis financiera del país es que no hay presupuesto para el pago de las primas, pero sí para invertir más de 9.600 millones de pesos en 23 camionetas blindadas para el esquema de protección presidencial, 9.515 millones de pesos en armamentos para el Esmad y 3.350 millones de pesos para posicionar, de manera favorable, la imagen de Duque en redes sociales.
Mientras la incertidumbre crece sobre si pagarán o no las primas, el presidente se presenta como omnímodo ante todos los televidentes, de lunes a viernes a las seis de tarde, haciendo propuestas que benefician más a los empleadores que a los empleados.
Propuso beneficios al sector de los comerciantes, exonerándolos del pago del 19% del IVA en canon de arrendamientos, generando en últimas un alivio al bolsillo de pequeños y medianos empresarios. Buena noticia para ellos, porque en tiempos de crisis financiera a nivel mundial, tienen derecho a obtener beneficios, sin embargo, es necesario ayudar a dicho gremio sin dejar a un lado a los trabajadores, que a la postre son los que mantienen el sistema económico del país en actividad y por consiguiente deben ser merecedores de obligaciones contractuales (como el pago de las primas).
¿Por qué beneficiar a unos sí y a otros no? ¿No se supone que la soberanía nacional está sobre todos los ciudadanos? ¿Dónde quedó el principio de equidad al momento de legislar?
Dicha sugerencia, de aplazar el pago de las primas de junio para el segundo semestre del año, la puso sobre la mesa la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), y la contempló nada más y nada menos que el ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, pero la idea principal de Fenalco era que el gobierno nacional subsidiara el pago de las primas. No obstante, Carrasquilla le apuesta más al aplazamiento del pago, porque asegura que no hay suficiente flujo de caja; seguramente el ministro tiene razón, pero qué curioso que no haya presupuesto para trabajadores y sí para inversiones y gastos como los antes mencionados.
La idea de no pagar las primas ya la había hecho el exvicepresidente Germán Vargas Lleras, quien además sugirió bajar salarios, no pagar las primas de junio y de diciembre y suspender el pago de las cesantías y sus intereses.
Por otra parte, es importante recordar que el presidente Iván Duque señaló en su programa de televisión nacional que iba a subsidiar durante tres meses el 40% del salario mínimo para todas aquellas empresas que demuestren que sus ingresos decayeron en un 20%. Dicho anuncio era la noticia propicia para ganar popularidad en medio de la crisis de su imagen. Sin embargo, lo que no dijo el mandatario es que en Colombia la cifra de informalidad laboral para el primer trimestre del año (según el Dane) era del 47,9%, lo cual quiere decir que:
1. Cerca de la mitad de la población no trabaja en empresa y no recibe plata de nómina (47,9%).
2. El 12,6% de la población está en desempleo, sin mencionar los despidos masivos que han habido en épocas de coronavirus.
3. Solo el 39,5% de los colombianos recibe una nómina (a ese porcentaje hay que restarle los nuevos desempleados).
En ese orden de ideas, se puede inferir con facilidad que el "subsidio" que hará el gobierno nacional no es una solución para todos, sino para algunos. Además, como si fuera poco, quieren quitar pago de horas extras, nocturnas y dominicales. Dicha propuesta la hizo la presidenta de Acopi, Rosmery Quintero, quien sostuvo en entrevista para La FM que una medida para reactivar la economía sería quitar el pago de las horas extras de dominicales y horas nocturnas. De hecho, fue enfática en que los turnos dominicales sean pagados como días ordinarios.
¿Cuál es la ayuda? ¿Será posible que se metan con los ingresos de los trabajadores?
Por último, toca esperar para ver si ese anuncio populista del subsidio del 40% del salario mínimo sea una realidad, no vaya a pasar como lo sucedido con los subsidios de los $160.000 que nunca llegaron a un gran porcentaje de las familias más vulnerables del país.
