Luego de 30 meses de relativa calma por el proceso de desmovilización de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, como consecuencia del proceso de paz que se está implementando en el país, en los últimos siete días han regresado las preocupaciones y angustias de los habitantes del norte del Cauca, por la presencia de nuevos actores armados, que se identifican como presuntos miembros del Ejército de Liberación Nacional, ELN.
Como se sabe, en el norte del Cauca fueron instaladas tres zonas campamentarias para la implementación de los acuerdos de paz con las FARC, en los municipios de Caldono (Pueblo Nuevo), Miranda (Monte Redondo) y Buenos Aires (La Elvira).
La situación angustiosa fue denunciada a través de Proclama del Cauca por el secretario de gobierno del Municipio de Toribío, Mauricio Casso, quien confirmó que el pasado 2 de marzo en la vía que de Toribío conduce a Caloto, a la altura de la vereda Rionegro, ll pasado 2 de marzo en la vía que de Toribío conduce a Caloto, a la altura de la vereda Rionegro, las autoridades indígenas evidenciaron la presencia de 10 hombres armados con brazaletes del ELN.
“La presencia de este grupo por el sector de Río Negro, en la vía que comunica los municipios de Toribío y Caloto y que fue de dominio de las Farc, llamó la atención de la guardia indígena que pudo comprobar el tránsito de estos sujetos armados. Por eso, las autoridades nativas y líderes campesinos del norte de Cauca, ya están coordinando planes de contingencia para evitar que el municipio, nuevamente, sea escenario del conflicto armado”, explicó el funcionario.
Según Casso, de inmediato la Guardia Indígena activó controles territoriales en puntos estratégicos. Sin embargo, este sábado 18 de marzo, siendo las 13:10 horas, una caravana de la Policía Nacional –EMCAR- comandada por el coronel Edwin Toro Salazar, comandante operativo del Departamento de Policía Cauca, que había asistido a un consejo de seguridad realizado en horas de la mañana en el municipio de Toribío, en su desplazamiento de regreso a la capital del Cauca a su paso por la vereda La Buitrera, sobre la vía Toribío-Caloto, desde las partes altas de las montañas fue atacada con ráfagas de fusil, impactando un disparo en el hombro del patrullero Juan Carlos Peña Hortúa, quien conducía el camión en el que se movilizaba la patrulla policial de 38 miembros.
El hecho fue confirmado para Proclama del Cauca por el coronel Nelson Díaz, subcomandante del Departamento de Policía Cauca:
En la región reina la confusión pues los nuevos actores armados portan camuflado, fusiles y brazaletes alusivos al ELN, aunque hay quienes aseguran que son disidentes de las Farc que son acogidos por la otra organización guerrillera.
En estas circunstancias, las autoridades indígenas del norte de Cauca, ya están coordinando planes de contingencia para evitar que Toribío, nuevamente, sea escenario del conflicto armado que por años marcó a sus habitantes de las más duras arremetidas de la guerrilla en la zona.
Precisamente el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, dijo que localidades como el norte y la zona pacífica de Cauca, necesitan de una presencia más activa y una reacción mucho más eficaz de la Fuerza Pública, al referirse a la presencia de otros actores armados en las zonas que antes tenían las Farc.
En otros sectores del Departamento del Cauca, como en el Municipio de Argelia, al sur, algunos comerciantes denunciaron extorsiones a nombre del ELN que piden millonarias consignaciones.
Las informaciones de los medios de comunicación
En esta situación, ciudadanos del norte del Cauca pidieron a través de Proclama del Cauca que los medios de comunicación debieran ajustar sus agendas informativas hacia imaginarios de paz y la resolución de conflictos porque “muestran los incumplimientos de adaptación de las zonas campamentarias por parte del Gobierno como una justificación para la deserción de guerrilleros de las FARC que hacen tránsito hacia los nuevos actores armados que comienzan a operar en estos territorios, creando intranquilidad y nuevas acciones de guerra”.
Solidaridad con las comunidades indígenas del norte del Cauca
El secretario de gobierno del municipio de Toribío, Mauricio Casso, aprovechó el diálogo con Proclama del Cauca para hacer una convocatoria de solidaridad regional pidiendo un apoyo decisivo para el sostenimiento de la Guardia Indígena que trabaja en turnos de 24 horas en los “puntos de resistencia civil” para garantizar la paz y la tranquilidad en la zona. Dijo Casso que son más de 1.500 hombres que necesitan logística para soportar el frío, recursos para su alimentación, vestuario y demás recursos logísticos que permitan el cumplimiento de su misión. El llamado fue hecho para la vinculación de entidades privadas y las administraciones municipales, especialmente.
