Promover un paro o movilización nacional a partir del lunes, acabando de ver lo que estas "marchas" produjeron en Bogotá y alrededores, es una clara invitación a desestabilizar el país y a incendiario. Es una invitación al desorden y el caos.
La izquierda promulga y exige democracia, pero es incapaz de respetar los resultados democráticos cuando les son adversos.
Ganó Duque, ganó la derecha. Esperen con calma, ya solo le quedan dos años.
Al menos, a los presidentes de derecha se les puede cambiar cada cuatro años. No sucede lo mismo con los de izquierda, quienes una vez consiguen el poder son eternos. No creo necesario citar ejemplos.
Repito, todos los caminos nos conducen a la ruina como país.
La corrupta derecha en el poder, con sus militantes ciegos, sordos y mudos, y que únicamente vota por quien diga el mesías del Uberrimo, está dedicada a dilapidar lo poco que queda.
Están robando y repartiendo de manera despiadada el erario entre familia, amigos y cercanos.
Y si la solución a lo actual, por parte de la la izquierda es don Gustavo Petro Urrego, igual llegaremos a la ruina. Es que el socialismo de Petro (contrario a lo que a voces gritan sus idolatras devotos) no es el de Canadá, Suecia, Dinamarca, etcétera (que en realidad son monarquías constitucionales).
Digo, que lo de Petro Urrego pretende para nuestra patria, no es aquel socialismo bueno de estos países. Por una sencilla razón, jamás lo he visto reunido con Justin Trudeau, primer ministro de Canada, o con el primer ministro de Suecia, o con el ídem de Dinamarca. ¡Jamás!
Por el contrario, siempre lo vi simpatizante, reunido y en contubernio con: Hugo Rafael Chávez Frías y Luiz Inácio Lula da Silva. Es más, es don Gustavo asistente y firmante del Foro de São Paulo.
Defensor también de Nicolás Maduro. Jamás contrario, crítico o rechazando a Ortega en Nicaragua, ni a los hermanos Castro en Cuba. Simpatizante también de los Kirchner en Argentina, etc.
¿Entonces?
Y aún así —los adeptos de Petro Urrego— a quienes con el anterior raciocinio pensamos y deducimos que lo que este ególatra reyezuelo pretende para nuestra Colombia es el castrochavismo nos tildan de personas sin criterio, que nos hemos dejado influenciar y atemorizar por el discurso del Centro Democrático y su eterno líder.
Así va nuestra política.