Antes de asumir la presidencia de Fabricato, el ejecutivo caleño Gustavo Adolfo Lenis, fue la cabeza de Neocorp, que es parte del grupo Eljuri del Ecuador. El conglomerado que logró la representación de Hyundai en Colombia; no obstante, la disputa con Carlos Mattos, quien termino en una cárcel en Barranquilla por el escándalo.
Lenis en los últimos cuatro años ha intentado sacar adelante Fabricato, la emblemática textilera paisa, que terminó golpeada por la apertura y el contrabando, Gustavo además intenta defender a los 1200 trabajadores de la compañía. Una vez la junta directiva decidió entrar a la ley 1116 de 2006, Lenis espera tener un mayor margen de maniobra.
Finalmente, la junta directiva, que tiene varios empresarios caleños como miembros principales, tomó la decisión de solicitarle a la Superintendencia de Sociedades la autorización para poder entrar en el proceso de reorganización. La Supersociedades, hace unos días, al fin aceptó la entrada de la textilera, marcando un momento en la historia de la compañía.
La crisis
La tradicional empresa antioqueña tiene problemas por el aumento de los costos, el desabastecimiento de materia prima y la disminución de las ventas. Los pasivos ascienden a $463.575 millones. Para dar una idea de las dificultades, desde febrero el presidente Gustavo Alberto Lenis anunció la suspensión de la producción de textiles Demin, uno de los productos estrella de la firma.
Si bien durante el 2021, es decir desde hace más de tres años, la empresa dirigida por Lenis registró ingresos por $409.313 millones, un 55% más que en 2020, periodo cuando obtuvieron utilidades de $263.916 millones. Es decir, había números esperanzadores, si se tiene en cuenta la historia de Fabricato, que en siglo 20 alcanzó su ascenso y en el 21 está intentando salir de la tempestad. En 2022 parecía que la textilera lograba al fin salir a flote, como lo dijo Lenis en una entrevista en Forbes, que retomó del portal de Fabricato.
Una empresa emblemática en la industria colombiana
El 26 de febrero de 1920 se constituyó en Antioquia la Fábrica de Hilados y Tejidos del Hato, hoy la organización se conoce como Fabricato. Carlos Mejía, Antonio Navarro y Alberto Echavarría fueron los arquitectos de una de las empresas más reconocidas en el país. En consecuencia, la organización antioqueña superó los 100 años de existencia.
Si bien en su momento los fundadores quisieron una empresa que produjera telas teñidas, satinadas y de algodón, con el tiempo Fabricato expandió su misión original y alcanzó el reconocimiento.
En el punto más alto de su acenso, Fabricato contaba con tres fábricas y se estaba extendiendo a lo largo del país, con plantas como Sedalana y Riotex, y en 1960 realizó pedidos a Panamá y a Nicaragua en Centro América. En contraposición, en el siglo 21, la firma conoció las dificultades.
La crisis que no se pudo detener
En 2019 la empresa presentó pérdidas por $10.140 millones, en julio de 2020 existían problemas por $8.974 millones y para entonces, la caída parecía inminente; no obstante, a partir de entonces la empresa parecía ponerse de píe con años más esperanzadores.
Para desgracia de la organización de Medellín los tiempos amables fueron una ilusión, la competencia de los productos importados, la inexistencia de aranceles a materias primas de los rivales, el contrabando y las deudas colocaron a los paisas contra las cuerdas. En efecto, Fabricato en 2024 pidió entrar a la ley 1116 de 2006, más conocida como ley de insolvencia o de quiebras a ver si logra ver un nuevo día. Otro anuncio esperanzador, que se sumó a la alianza hecha con una gran textilera brasilera, más otros negocios que se espera que den aire, como la denominada Ciudad Fabricato.
El centro comercial de propiedad de los chilenos de Parque Arauco
La fábrica de Fabricato se montó en los años 20, sobre un valioso y extenso lote en Bello, Antioquia, que fue vendido en 2019 para realizar un desarrollo inmobiliario y comercial denominado Ciudad Fabricato.
El proyecto concluyó, y ya está operando como un centro comercial, propiedad de los chilenos de Parque Arauco, que cada día se expanden más en Colombia.
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