El tatuaje como arte milenario, tradición de tribus ancestrales, de significados variados según la época y lugar es hoy en día en Colombia considerado un tabú en vía de extinción.
Etimológicamente definido <> del samoano “marcar o golpear dos veces”, visto en culturas como el paso de la niñez a la adolescencia. En las tribus de Polinesia se comenzaban a hacer tatuajes desde muy temprana edad hasta que el cuerpo no tuviese ningún lugar del cuerpo virgen, mientras que en Egipto se le atribuía funciones protectoras relacionadas con sus deidades y a la protección mística.
Durante el siglo IV los tatuajes fueron prohibidos en el imperio Romano por el emperador Constantino, pues transformaban lo creado a imagen y semejanza de Dios. En Japón se realizaban tatuajes para hacer semejanza a los kimonos de la realeza, luego se hacían entremezclas de héroes, animales místicos y demás ampliando la extensión de los tatuajes en el cuerpo, en 1870 se prohíbe la costumbre por ser subversiva.
Hoy en día los tatuajes están inmersos en la sociedad y en las sub-culturas urbanas que se han dado a conocer a lo largo de los últimos años. Podría decir que se ha atribuido un nuevo significado a los tatuajes, en diferentes partes del mundo occidental los tatuajes se han hecho a conocer como símbolo de rebeldía, de satanismo (aprovechando el alto poder religioso de algunas regiones), una especie de tabú, se genera un rechazo social, que bien puede ser que se genera por desconocimiento de este arte o de la percepción personal que se conlleva realizarse un tatuaje.
En países como Argentina el tatuaje ha dejado de ser un tabú a ser una moda común en las calles del país, no se condiciona o se atribuye a algo malo el tener uno o más tatuajes, hoy en día podemos ver tatuajes que hagan alusión a los equipos de fútbol, grandes personajes de la historia, retratos de familiares, signos, letras y símbolos, entre otros.
La nueva ola del tatuaje puede verse o interpretarse como una búsqueda de la identidad de cada individuo, siempre en busca de la originalidad y destacar en la sociedad al punto de que hoy en día puede interpretarse como una moda, pues desde los avances tecnológicos y de estilos de tatuajes cada vez son más personalizados al gusto de cada persona.
Juan Pablo Rodríguez un jóven tatuador con 4 años de experiencia en el negocio, explica que los tatuajes pueden variar de significado según como influya en cada persona, en tanto nos cuenta sobre los suyos: “Por ahora tengo 4 tatuajes, todos son calaveras pero son de distintos estilos, por ejemplo el primero que me hice fue una calavera mexicana, cuyo significado era empezar a aprender el arte de tatuar, pues de lo que vivo aquí en Argentina.
La segunda calavera me la hice yo, es un diseño personal que quise hacerme para empezar a probar la piel y las máquinas, la tercera es un regalo de un amigo muy querido y es estilo old school, muy clásico con líneas gruesas muy definidas, con flores alrededor que la decoran muy típico en este estilo de tatuajes, y la ultima es un intercambio de tatuajes que hice con un compañero del laburo en el estudio de tatuaje, es un estilo new school con líneas no tan definidas y con mucho color y contraste, por el momento me divierto dejándoles un poco de mi arte y mi estilo a las personas que me brindan la confianza de dejarlos tatuarse por mi, de hecho muchas personas se han dejado plasmar diseños míos”.
Finalmente, podemos ver como a lo largo de los años los tatuajes han cambiado su significado tanto para la sociedad como para las personas que se plasman este tipo de arte en la piel, atravesando eras como arte milenario a tabú de algunas sociedades, de tabú a peligroso, dañino y ofensivo, a muestra de independencia y así hoy en día a moda, gusto o búsqueda de la identidad.
