Quien hable con los manifestantes se dará cuenta que rechazan toda organización política partidaria, extraña situación que parece conducirlos a un desgaste inútil
“Bien podría ser demencia senil, en este caso peligrosa. Pero de a poco su entorno se transforma en cementerio, patíbulo, escupidera, etcétera”. Escribe Juan Mario Sánchez
Las mentiras y el odio difundidos desde su Twitter tienen un poder descomunal. No canten victoria, inscriban su cédula. En la posverdad los malos están ganando