En pleno siglo XXI no podemos seguir siendo testigos de una irresponsabilidad colectiva donde se juega con la vida y se celebra la barbarie y la inconciencia
Atrás quedaron los años de gloria y la euforia de público viéndolo salir por la puerta grande, el gran torero vive el ocaso de la fiesta brava en medio de un descalabro económico
"No existe método más noble y que respete de mejor manera a los toros que las corridas. Mueren adultos y con la posibilidad de prolongar su vida por indulto"
Con la sentencia 283 de 2014 la Corte Constitucional manifestó por más cultural que sea, un espectáculo sí se puede prohibir. El congreso tendrá que definir