Timo sabe reconocer quién es quién, a quién corresponde cada tarea en un momento y combina sus habilidades para producir los resultados esperados. Jamás se atribuye nada a sí mismo.
La campaña al Congreso está desabrida, sin propuestas, con visos de agresividad, y exceptuando a Angélica Lozano y algún otro candidato, ninguno despierta pasión política
La Farc suspende campaña por falta de seguridad y saltan preguntas sobre lo indicado del momento para iniciarla y el nombre del partido, cuando crece el odio en la sociedad
Timochenko es el distractor: la gente le tira huevos mientras su aliado Petro pasa por la calle del medio, y Santos hace lo que los socialistas corruptos
