El lugar era viejo, clandestino y acabado. Una suerte de hueco rebosado, una atmósfera olorosa y complicada, peligrosa. Y aún así, atractiva, incluso adictiva
La delata lo ligero de sus pasos. Esa libertad de aquellos que escaparon a las bombas de los noventa, al gol de último minuto contra Alemania en Italia...