Para empezar, no cabe la palaba “secuestro”, pues la presencia de la periodista o fue voluntaria y pactada, o fue inesperada y vista por quienes la retuvieron como una situación que requería controlarse
Culpar a las víctimas por lo que les hacen sus victimarios es lo que tristemente ha sucedido con el secuestro, retención o lo que sea, de nuestra colega Salud Hernández
A diferencia de quienes escribimos desde la lejanía del internet, ella con un termo de agua fría (imagino) acude a donde no vamos por físico miedo y terror
Hace un año la periodista publicó en El Tiempo ‘¿Ratas Humanas?’, una dura crítica a la guerrilla, que milicianos del ELN se la recordaron en medio de la discusión