.Publicidad. Ya están empacadas la pañalera, las sudaderas, las pintas de Lorelei, las cajas de chocoliss, las ansias de gol y hasta el poco anonimato que les quedaba, para el trasteo a Mónaco, el cual, seguro, no organizarán los inmigrantes ecuatorianos que se han apoderado del negocio de las mudanzas en Madrid. (Ahora es Rybolovlev […]