Tomando de ejemplo a Popayán, un análisis de por qué las clases dominantes recurren a la violencia para derrotar un proyecto político que amenaza sus privilegios
Para que el país no se siga desangrando, tendríamos que perdonar a los subversivos, a los militares, a los paras, a la delincuencia común, a los políticos
Repugnan los que legislan para subir sus salarios, mueven leyes para autoexonerarse, reciben coimas para favorecer empresarios, se endeudan para comprar votos…
La tramoya de la política, no solo la colombiana, siempre se ha encontrado en manos de ingeniosos mecánicos de la sicología social y de la sociología emocional
Joe Biden se posesionó como presidente, Ángela Merkel dejó el poder en Alemania tras 16 años y Daniel Ortega se reeligió en Nicaragua con represión y violencia