Para defenderse de supuestos conspiradores como Uribe, Santos y Duque, el ruso los ha apoyado a cambio de que le compre armas y refinerías por USD 36 mil millones
Nadie puede argumentar contra la legitimidad de las elecciones brasileñas porque ello irrespetaría a quienes masivamente rechazaron la corrupción de Lula y Dilma