El ruido de la corrupción de la costa parece algo lejano del centro, que no nos toca ni afecta, pero es tan grande que parece una culebra que todo se devora
Defendiendo la empresa hoy cuestionada, Abudinen dijo que si no cumplía la llevarían al cementerio. Hoy protagonizó una simple renuncia tardía, y tal vez no pase más
Mientras que en una moción de censura la ministra fue el centro de atención, las principales víctimas del escándalo, los niños de la ruralidad, siguen sin conexión
Las revelaciones de la periodista Paola Herrera generaron rupturas en el Partido Liberal. Gabriel Santos, el primer uribista que se abre de la ministra Abudinen.