"Con la misma celeridad con que el gobierno ha expedido decretos, debería regular las condiciones básicas para la vuelta a la presencialidad, aun en itinerancia"
¿Realmente vale la pena permitir arriesgar la vida de muchas personas, mientras que existen otras opciones que pueden dar viabilidad a la educación no presencial?
La realidad demostró que los entornos con mayor capacidad adquisitiva sufrieron menores impactos en el acceso a las actividades académicas, ¿qué pasó con el resto?