Los políticos del liberalismo comienzan a hacer cálculos electoreros y montar estrategias de autoprotección, bien lejos de liderar la paz y el posconflicto
Vemos hoy proyectos y campañas que promueven mentiras y desinformación, que recurren a movilizaciones basadas en el miedo, odio, y discriminación obtener sendos triunfos electorales