El hombre fue detenido y ahora las autoridades tendrán que determinar si aplica o no el principio de legítima defensa y si la respuesta fue proporcional al ataque
Para evitar que se pida detención domiciliaria por condición cabeza de familia con el argumento de que no se prive al niño (hijo) de jugar pelota con su papá…
El caso del médico que mató a tres asaltantes - aún por explicar- nos reafirma en que no debemos abandonar el principio fundamental de la autoridad legítima para reemplazarla por la “legítima defensa”.
"Las circunstancias de vulnerabilidad e indefensión cansan y desesperan hasta el mas santo, llevándolo a hacer lo inimaginable, así sea a riesgo de ir a una cárcel"