Al llegar a la presidencia en el 2010, el exmandatario reservó su tercera embajada más importante para un amigo de infancia, conocido por todos los colombianos
El exembajador José Gabriel Ortiz puso el dedo en la llaga del infierno de los compatriotas en el aeropuerto de Ciudad de México, ¿sabían los funcionarios de la embajada?
En una cena Carlos Julio Ardila convenció a José Gabriel de regresar a la televisión, una llamada de Juan Antonio De Brigard cambió su vida tranquila en el D.F.