Tanto el proceso con los paras como el proceso con las Farc han estado cargados de violencia simbólica, aquella que se asocia al no reconocimiento del otro
Mientras Londoño, Catatumbo y Márquez se abrazaban con Santos en Mesetas, Santrich se declaraba en huelga de hambre con 1600 presos de las Farc que esperan desde hace meses ser amnistiados