Conflictos laborales por todas partes, la huelga del Cerrejón le quedó grande, el Ministerio escorado del lado empresarial y propuestas para el mínimo entre 0 % y 2 %
La huelga de los rappitenderos importa como fenómeno social y como ejercicio de un derecho humano fundamental: nuevas formas de trabajo crean nuevas y espontáneas formas de protesta colectiva, de huelga.
Malas prácticas por parte de los prestadores de servicios y consumidores generan daño ambiental, accidentalidad de usuarios, entre otros flagelos de seguridad.
Para reducir la informalidad no hay fórmula distinta que simplificar el estatuto tributario, la declaración de renta, y levantar la lupa sobre los asalariados