Muchas de las historias de nuestro Caribe parecen inverosimiles, pero quienes las conocen de primera mano saben que pueden ser más ciertas de lo que parece
Don Jorge es unos de esos conversadores que ya no se encuentran. Un día, hablando de todo, surgió el tema de las peleas callejeras, ¡vaya sorpresa la que nos llevamos!
En Tamalameque había una costumbre muy contraria a la ley, un hábito que los varones hacían al pie de la letra una vez iniciaban la vida de parranderos: robar gallinas