Cien días después de la elección no vemos un sólido plan de gobierno, sí un montón de improvisación, peor aún, demasiadas contradicciones entre su bancada del Congreso y el Ejecutivo
En las primeras metas volantes habrá un compás de espera, pero en los primeros puertos de montaña habrá una feroz rebeldía, y en la escalada de 48 meses sin tiempo para mirar atrás
Me ilusiono pensando en que Duque va a ser ante todo un hombre racional que intentará gobernar para todos los colombianos. Pero debo decir que hay cosas que alarman.
Duque tendrá que hacer una coalición para garantizar la gobernabilidad, que implicará ajustes a su programa, y reconocer en el triunfo el apoyo al sistema económico y político imperante